Publicación originalmente realizada el 29 de junio de 2023 en Facebook de la Delegación Antártica Chilena.
Hoy jueves 29 de junio, más de un centenar de asistentes concurrieron al Terminal Pesquero de Puerto Williams para celebrar la tradicional misa y posterior procesión de San Pedro, santo patrono de los pescadores, ad portas de iniciarse una nueva temporada de extracción de centolla en la zona austral.
En la instancia, personas ligadas al rubro pesquero junto a sus familias, acompañadas por diversas autoridades civiles, navales y eclesiásticas, se embarcaron en las lanchas dispuestas para navegar en las aguas del canal Beagle, donde fueron entregadas las ofrendas florales en memoria de los difuntos que han perdido su vida en el mar.
El presidente de la Asociación Gremial de Pescadores y Armadores Artesanales de Puerto Williams, Erwin Olivares, comentó que “esta celebración para nosotros es súper relevante, porque en ella uno le pide al Santo Patrono que nos cuide afuera en la faena, que cuide a nuestras familias mientras nosotros estamos afuera, y también que nos dé una buena faena. También, que de alguna forma nos proteja de todo lo que son las inclemencias del cambio climático, ya que últimamente se ha visto mucho viento, vientos que no eran muy comunes acá. Y también es importante que nos haya acompañado la comunidad, con quienes pudimos compartir y de alguna manera mostrarles nuestro quehacer”.
Por su parte, la delegada presidencial provincial de la Antártica Chilena, María Luisa Muñoz, quien lanzó una de las ofrendas florales en la bahía de la capital provincial, agradeció haber sido partícipe de esta solemne actividad e hizo un llamado frente a la temporada de extracción de centolla que comenzará este sábado 1 de julio y culminará el próximo 30 de noviembre. “Fue un placer poder acompañarlos, estar con ellos. Prontamente se inicia la temporada de centolla, por lo que recomendamos seguir las normativas que correspondan, utilizando las artes de pesca autorizadas. También en resguardo de cada uno de ellos, hacemos un llamado a mantener la seguridad en el mar, que sabemos que es bastante complejo aquí en la provincia”, sostuvo.
Al respecto, Olivares también mostró su anhelo para que “los pescadores cumplan con la legislación vigente, haciendo una pesca sustentable, una pesca que se pueda mantener en el tiempo, que no se produzcan ilegalidades y sobre todo que se cuiden”.
Preocupa descenso en captura de centolla
Por otra parte, el presidente de esta asociación gremial fundada en 2018 y que actualmente es integrada por 32 socios –todos de la comuna de Cabo de Hornos-, ve con preocupación el descenso en las capturas de este crustáceo en los últimos 10 años, el aumento del esfuerzo pesquero durante las faenas y las cambiantes condiciones meteorológicas actuales.
“Desde el año 2012, la pesca artesanal de centolla ha venido bajando. El año 2012 tuvo su peak en alrededor de 6 mil toneladas extraídas, pero año a año ha ido bajando. El año pasado fue algo de 3 mil 200 toneladas, que es poco. Lo que sí compensan son los precios. En la medida que sale menos, los precios son mejores, pero hay un montón de cosas que en realidad no se están atacando. Una de las cosas complicadas que están pasando, es que está subiendo enormemente el esfuerzo pesquero, entonces, lamentablemente, la autoridad o el Estado no le ha puesto oído a los pescadores, que estamos viendo cómo poder legislar sobre eso. Cada vez el esfuerzo pesquero va aumentando: si antes se pescaba con 500 trampas, ahora se está pescando con mil, mil 500, 2 mil trampas. Y, considerando eso, cada año la cantidad de toneladas extraídas es menor. Ésa es una gran preocupación para los pescadores de Williams”, dice el presidente del gremio que principalmente trabaja en las aguas del canal Beagle -incluyendo la zona de Puerto Toro-, Isla Bertrand, Bahía Nassau y entre 5 y 10 millas náuticas al norte del Cabo de Hornos.
¿Espera que para esta temporada siga esta tendencia a la baja?
“Ojalá que no, porque también la centolla es algo cíclico, pero sí hay que cuidarse mucho del tiempo. Nosotros no somos expertos en el cambio climático, pero el tiempo está cada vez más raro y al menos lo que hemos pescado del centollón, cada vez tenemos más días de estar en puerto, porque el clima no nos deja pescar. Ha estado demasiado malo el mar, mucho viento, entonces, esperemos que lo que resta del invierno sea mejor el tiempo, especialmente el viento. A nosotros no nos afecta el frío, no nos afecta la lluvia o la nieve. Nos afecta el viento. Y eso espero: que ojalá podamos trabajar con mejor tiempo”.